El pasado Sábado 20 de Junio, algunos alumnos del Máster de Diseño Aeronáutico y del Máster en UAVs (Drones) pudieron visitar el Museo del Ejército del Aire dentro del Marco de visitas y charlas que realizan los diferentes programas formativos con el objetivo de enriquecer los conocimientos que adquieren durante las clases. Algunas de estas visitas han sido al Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial, a instalaciones militares, o las industrias Aeronáuticas más punteras en Tecnología a nivel Nacional.
El Museo del Aire
El Museo es un organismo del Servicio Histórico y Cultural del Ejército del Aire cuya finalidad es extender y conservar la historia y patrimonio histórico de la aeronáutica española. Consta de una superficie de cerca de 70.000 metros cuadrados entre la zona de exposición exterior donde se exponen aeroplanos como el gigantesco avión Stratotanker hasta el minúsculo Airtruck, pasando por helicópteros, reactores de combate e hidroaviones. Además cuenta con siete hangares con más de 140 aviones y materiales vinculados con la aviación.
Alumnos de Ixtitute
Alumnos de Ixtitute
Dicho todo lo anterior tenemos que dar las gracias al personal del “Museo del Ejército del Aire” y a la “Asociación Amigos del Museo” su profesionalidad y cercanía que nos brindaron el pasado sábado 20 de junio a los alumnos pertenecientes al Máster en UAVS y al del Máster de Diseño Aeronáutico. Sín todos ellos Ixtitute no tendría la oportunidad de ofrecer el rico conocimiento que nos ofrecen en las visitas.
Los Inicios de la Aeronáutica
La Aeronáutica Militar española se origina durante el reino de Alfonso XII. Fue en aquel momento cuando por Real Decreto del 15 de diciembre del año 1884 nace el Servicio Militar de Aerostación”, afectando directamente a la cuarta Compañía del Batallón de Telégrafos del Arma de Aviación, situándose bajo la supeditación del Ministerio de la Guerra, similar a lo que a día de hoy sería el Ministerio de Defensa. En 1889 fue la primera vez que se abasteció de los recursos materiales imprescindibles para el comienzo de sus labores, que se formó de un globo aerostático llamado ‘Yon’, de procedencia francesa, que incorporaba un torno de recuperación activado por una máquina de vapor.
Durante ese periodo pasó a llamarse ‘Compañía de Globos del Batallón de Telégrafos’, teniendo globos cautivos y de globos libres para ejecución de elevaciones.
En el año 1895 Don José Suárez de la Vega, coronel de ingenieros, efectuó un análisis en el que se tasaba el empleo militar de los medios aéreos. Como efecto del mismo el gobierno declaró y difundió el 17 de diciembre de 1896 una ley por la que se creaba de manera oficial el Servicio de Aerostación Militar, constituyendo sus primeros emplazamientos en Guadalajara bajo el mando del Comandante de Ingenieros Don Pedro Vives y Vich, a quien puede considerarse como el fundador de la Aeronáutica Militar en España. Fue en dichas ubicaciones donde se fundó la primera escuela de vuelo en donde se llevaban a cabo cursos para la adquisición de piloto y observador de globo.
Las bases del Servicio de Aerostación ayudaron a que en el año 1905 Torres Quevedo liderase la fabricación del primer dirigible español gracias a la colaboración del entonces Capitán Don Alfredo Kindelán. Este proyecto concluyó con culminó con gran notoriedad dando como consecuencia un dirigible bautizado como “El España”.
Tras años de pruebas y formación el Servicio de Aerostación Militar fue aprovechado por vez primera en campaña durante las operaciones en Melilla del año 1909, en cuyo lugar actuaron como plataforma de observación alzando un mapa de una zona hasta ese momento desconocida. Luego, siendo consciente del potencial de esta nueva plataforma de reconocimiento fueron empleados en la toma del río Kert en Marruecos en 1912, y en las operaciones de Tetuán entre 1913 y 1914. Desde esos años hasta 1927, la unidad brindó en Marruecos continuos y preciados servicios.
Todas estas investigaciones confluyeron a crear en 1913, el Servicio de Aeronáutica Militar a cargo de la Sección de Ingenieros del Ejército, con dos especialidades bien determinadas: la AEROSTACIÓN, delegada de las plataformas más ligeras que el aire como son globos, dirigibles y cometas, y la AVIACIÓN, con los medios de locomoción aérea basados en máquinas más pesadas que el aire.
La Aviación Militar Española
La Aviación Militar surgió en España oficialmente en el año 1913, con el “Servicio de Aeronáutica”, con sus dos áreas: Aviación y Aerostación. No obstante, antes de esta fecha sucedieron una serie de hechos que merecen ser recordados.
A finales del año 1910, el gobierno español, informado del impacto que supuso los nuevos aviones, comisionó al capitán Kindelán a viajar hasta Francia para adquirir tres de estos aeroplanos de clase “Farman”. Tras su compra se inauguró la primera escuela de pilotos, situada en Cuatro Vientos, Madrid, siendo el primer aeródromo español.
Alfonso XIII
En el año 1911, se llevó a cabo el primer curso de pilotos militares, algunos oficiales del ejército como Kindelán, Herrera, Barrón, Ortiz y Arriaga, los cuales ya tenían el certificado de piloto de globo. A este primer curso se sucedieron otros y a partir de ese momento la Aeronáutica Española pudo tener un extenso número de pilotos, cuya destreza competía con la de los aviadores extranjeros. Tras la formación de estos nuevos pilotos, la Aviación Militar actuó por primera vez en la guerra de Marruecos en el año 1913 como arma aérea.
La irrupción de la I Guerra Mundial causó una gran crisis en la Aviación Española por la escasez de materiales que se fabricaban mayoritariamente en otros países involucrados en la Gran Guerra. De todos modos, es importante rememorar que durante esta etapa crítica, sucedieron acontecimientos de gran progreso para la aviación española como fueron:
La creación de las primeras compañías españolas empleadas a la industria aeronáutica como son Construcciones Aeronáuticas”, “Elizalde”, “Hispano-Suiza” y un largo etc.
La inauguración en el año 1917 de la “Aeronáutica Naval”, cuya primera base de hidroaviones se situó en Murcia, que contaba con 12 hidroaviones comprados a los EE.UU.
En el año 1920 se vencieron las dificultades de escasez de material y la y la Aviación Militar lleva a cabo un reajuste de su organización gracias a la compra de 100 aviones, entre ellos modelos legendarios como los de clase “Farman F-50”, “Breguet-XIX” y “Havilland-Rolls”. En ese mismo año, además, se llevaron a cabo nueve cursos para pilotos titulándose 160 pilotos militares.
A partir de 1926 hasta el año 1935 se llevaron a cabo continuadamente las grandes conquistas españolas en el aire y cierra la primera parte de la historia de la aeronáutica española.